Hoy, primer día de trabajo del 2019 en Millennials Coworking. Hemos tomado las uvas con gran ilusión de que en este nuevo año que comienza se cumplan nuestros objetivos. Y entre esos 12 deseos, no exentos de algún que otro contratiempo con las uvas (nada se consigue fácilmente) hemos pedido fervientemente salud, paz, amor y sobre todo en estos tiempo, trabajo y estabilidad. Algunos trabajan por cuenta ajena, otros son funcionarios, muchos son autónomos y freelancer, pero hay muchos desempleados, profesionales o no, que ansían encontrar una actividad laboral donde desarrollarse. Al anhelar trabajo, algunos lo hemos hecho con entusiasmo, otros con apatía, otros con resignación, muchos con desilusión y otros muchos con nuevas iniciativas en mente.
En estos últimos me centraré, ya que la apatía, la resignación y la desilusión son emociones que no deben estar presentes en aquellos que quieran un cambio en sus vidas. Y todo cambio precisa de una acción enérgica.
Primero de todo tenemos que listar nuestros propósitos de manera razonable y con objetivos abordables. Acciones a corto plazo, metas a medio plazo y resultados a largo plazo. Sobre todo tenemos que tener en cuenta que nada se consigue sin un gran esfuerzo. Que estaremos rodeados de personas que han perdido la esperanza y que inconscientemente boicotearán nuestras iniciativas. Debemos seguir adelante, poniéndole imaginación, ideas y creatividad. Trabajo constante y no procrastinar ni un segundo, es la mejor receta. Emprender necesita una gran dosis de esfuerzo, constancia y entusiasmo. Y por supuesto rodearse de gente con iniciativa, positividad, con mente empresarial y con ganas de generar empleo. En Millennials Coworking tenemos todo eso y juntos podemos potenciarlo. Son mis deseos para este año que comienza para mí y para todos aquellos que forman parte de esta comunidad de coworkers.